Es mi análisis ....

Quienes entraron a la Sinaggoga Tiferet Israel de Mariperez, Caracas, no tienen nada que ver con esos grupos de malandros que envía el gobierno para amedrentar a los opositores.

El "comando" de quince sujetos que penetraron en el recinto lo hizo con un plan ulterior y dejando señales para hacer creer que son un grupo de calientes oficialistas, xenófobos y antisemitas.

A fin de crear la imagen de la profanación abrieron el armario de los libros sagrados y desparramaron sobre el piso los adornos de los rollos de cuero ( la toráh) sin tocar los rollos en sí, tal vez porque quienes cometieron el acto son posiblemente creyentes supersticiosos de alguna religión y temerosos de volver hacia ellos “una plaga maléfica”.

Sin embargo el foco de atención de su actividad se centró en las oficinas de la Asociación Israelita de Venezuela, allí donde se guardan los registros de los socios, y de donde se robaron los registros de la vida comunitaria y de los miembros.

Quienes observan los mensajes y la grafía en las paredes entienden que eso fue escrito por alguien que tiene más años de estudio que la misión Robinson y que toda la escenografía fue preparada para mostrar algo que en el fondo no es.

Venezuela tiene socios políticos peligrosos, extranjeros que ayudaron al presidente a consolidarse y que hoy comienzan a actuar independientemente siguiendo los intereses propios de sus organizaciones. Los mismos o similares que se aliaron a Carlos Saul Menem en Argentina a comienzos de los 90 y que cuando no pagó con la moneda prometida cometieron dos atentados, demoliendo la embajada de Israel y la AMIA en Buenos Aires y por último le cobraron con la vida de su hijo Carlos Jr.

Los efectos de las relaciones peligrosas comienzan a verse ya. Este operativo de búsqueda de información es el comienzo de una serie de actuaciones delictivas contra la comunidad judía.

Ojala mi análisis esté errado pero mi instinto no presagia paz y tranquilidad después de estas acciones.

Si son actos del hampa común organizada o de los socios políticos del gobierno, los días por venir no auguran serenidad.